25 de agosto de 2012.
Hoy es un día especial. No es el cumpleaños de nadie. Tampoco es mi aniversario o mi santo. Hoy hace un año de algo. De un algo que nunca olvidaré. De algo que hizo que mi vida cambiara. Hoy hace un año que la conocí. A ella, sí, a la mujer de mi vida. Thania Pérez. Nos costó un poco de tiempo empezar a salir juntos. Pero este día, hace justamente 365 días, no podré olvidarlo nunca. La primera vez que la tuve cerca de mí, la primera vez que vi su sonrisa, a la vez que veía caer sus lágrimas emocionada, mientras me miraba y gritaba mi nombre. Esa imagen siempre quedará grabada en mi mente. No es la primera chica que veo hacer eso por mí. Pero es que en esa mirada, vi algo único, que me enamoró profundamente de ella. Nunca había sentido esto por nadie, a pesar de todas las mujeres que han pasado por mi vida. Recuerdo cuando ese mismo día le firmé, le preguntaba su nombre…ella no se lo podía creer. Y cuando la abracé…la verdad es que fue un impulso, tuve que hacerlo, mi corazón me lo decía. Saber que en ese momento le estaba haciendo la persona más feliz del mundo me llenaba el autoestima. En ese momento no podía pensar, solo sabía que no quería perderla, que necesitaba volverla a ver, no podía dejarla allí con el autógrafo como si fuera una más. Entonces le escribí mi número de teléfono en el mismo papel que le firmé.
Ahora ella se ha mudado aquí, a Barcelona. Ha venido de Burgos solo por mí. Es preciosa. Vivimos juntos, en mi casa. Cada vez que la beso, o que duermo a su lado, noto la misma sensación que aquel 25 de agosto de 2011, cuando la abracé por primera vez. Es increíble lo que ha cambiado mi vida desde ese día. Ella le ha dado sentido, ha conseguido sacarme sonrisas en los momentos más difíciles, me ha querido como nadie me ha querido nunca, me ha dado razones para seguir luchando día a día.
La quiero, y punto.
Ahora está aquí a mi lado, dormida. Parece un angelito. Le acaricio el pelo y le doy un dulce beso en los labios. Abre los ojos y me sonríe. La abrazo.
Tha: Hoy hace un año que nos conocimos.
A ella tampoco se le ha olvidado…me emociona saberlo.
Leo: No se te escapa nada eh?
Tha: De ti no…tranquilo
Me sonríe. Le doy un beso de esquimal y le acaricio la espalda.
Leo: Hoy hace un año pero quiero que sean muchos más, eternos…te quiero Thania, y te querré hasta el fin de mi vida.
Entonces demostramos el uno al otro nuestro amor, besándonos, abrazándonos, acariciándonos, durmiendo desnudos, juntos y felices, como si no hubiera mañana…
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